Atalaje es el conjunto de arreos o guarniciones que se ponen en el animal de tiro para que arrastre con comodidad los carruajes. Vale acotar, que puede ser «de collerón» o de «pechera», según sea la zona del animal sobre el que se ejerce la tracción.
Para tener presente
Cuando el carruaje es arrastrado por un único caballo, el atalaje, por el tipo de enganche, puede ser de varas o de limonera. Independientemente de las variantes del carro, carreta, carroza o vehículo con dos o cuatro ruedas.
Importante
Por extensión se denomina también atalaje al conjunto de las guarniciones del ganado de carga. Para esta clase de trabajo el elemento es el baste, que descansa sobre el lomo del animal, sujeto a él gracias a la presión de la cincha y sobre-cincha. Con el fin de que no se corra hacia adelante durante la marcha y especialmente en las bajadas. Forma parte de este aparejo la tarria o ataharre, que es una ancha correa pendiente de la parte posterior del baste por medio de las caídas que están en contacto con la culata del animal, un poco por debajo de los quijotes; el pretal, que cuelga de la parte anterior del citado baste, pasando por delante del pecho, impide a su vez que aquél se corra hacia atrás en las subidas.
En este orden de ideas, este atalaje se completa con el bridón, de serreta o filete según convenga, y los ganchos o francaletes (fijos al armazón del baste) necesarios para afianzar la carga que se transporta.
Collerón
El collerón va unido a la sobre-cincha por una media-gamarra para evitar su cabeceo. De todas partes del atalaje, ninguna requiere tanta atención y vigilancia como el collerón. Si es pequeño sofoca al caballo, y si es grande dificulta el movimiento de los brazos del animal.
A su vez, conviene que sea proporcional a la alzada y volumen del cuadrúpedo, la cual se conoce porque una vez puesto su extremo inferior queda algo por encima de los encuentros. Si su forma no le permite quedar bien ajustado, o es excesivamente duro, su roce sobre el pecho origina escoriaciones, que se convierten en verdaderas heridas en un trabajo prolongado. Por eso es preciso que su mullido sea suficiente. Además, conviene que cada caballo tengo su collerón correspondiente. El cual, en un trabajo continuado, se habrá amoldado perfectamente a la configuración de su cuello y no le ocasionará molestias, difíciles de evitar si el collerón se cambia.
La pechera
A veces, sobre todo en los carruajes de dos ruedas, se reemplaza el collerón por la pechera. La cual es una correa ancha que pasa por delante del pecho del caballo en prolongación de los tirantes y que cuelga delante de la cruz mediante una correa que se llama sobre-cuello. En ésta van dos anillas para el paso de las riendas. La parte que toca el pecho del animal lleva una almohadilla de crin para hacer menos sensible su roce.
Del inconveniente explicado sobre el collerón, está libre la pechera, que se acomoda más fácilmente para distintos caballos. En cambio, con la pechera no puede desarrollar el caballo toda su fuerza de arrastre tan bien como con el collerón.
Tirantes
Los tirantes debenser muy sólidos y resistentes. Para un tiro ligero se hacen de cuero grueso, con el extremo anterior terminado en un gancho, y el posterior en una lazada con hebilla, que sirve para regular su longitud.
Sillín
Se debe aclarar que descansa sobre el tercio medio del caballo, por detrás de la cruz. Se extiende hacia abajo por medio de dos faldoncillos que terminan en puntas de correa que se hebillan, constituyendo una sobre-cincha. Para impedir que el sillín se corra hacia delante el atalaje tiene una grupera que termina en una baticola. De la grupera nacen lateralmente dos caídas, que sostiene la retranca.
Fuentes consultadas