Vendajes ecuestres
El caballo es uno de los mamíferos más grandes y fuertes que existen sobre el planeta. Aunque tengan una salud robusta, no escapan de sufrir algún tipo de lesión que perjudique su movimiento. Entonces debemos consultar un experto en veterinaria para que nos indique de los distintos vendajes ecuestres cuál es el más adecuado.
Por esta razón, vamos a hablar a modo de introducción de los tipos de vendajes ecuestres que existen. Estos tienen la finalidad de aliviar las dolencias presentadas en nuestros queridos amigos los caballos.
Tipos de vendajes ecuestres
- Vendas de trabajo, de reposo, de recuperación o de curación, de protección o traslado y Vendas de relleno.
Las vendas de trabajo
Son de consistencia delgada y elásticas para poder adaptarse mejor a las formas de las extremidades. Estás deben proteger los tendones y ligamentos inferiores de algún golpe, vibración o movimiento anormal dentro del trabajo.
Las vendas de reposo
Son de consistencia gruesa y brindan calor. Estás deben ser confortables y sirven para la recuperación de los tendones y ligamentos después de un arduo trabajo. Normalmente pueden ponerse junto con algún fomento relajante, el calor que aportan ayuda a la pronta recuperación. En lo personal recomiendo antes de poner el vendaje, dar por lo menos 20 minutos de golpes de agua a la extremidad para fomentar la irrigación sanguínea, esto ayudará a acelerar el proceso de recuperación.
Las vendas de recuperación o de curación
Son desechables de consistencia delgada y elástica y por lo general son auto adheridles.. Estás deben ser confortables y sirven para la recuperación o curación de la extremidad. Además protegen de agentes externos sobre alguna lesión abierta, tales como parásitos, insectos, tierra. Por lo general se colocan junto con una o más gasas y algún fomento desinflamatorio y antiséptico.
Las vendas de protección o de traslado se dividen en tres grupos:
- Vendas de traslado de viaje corto (4 horas máximo): pueden ser las mismas que las de reposo, su consistencia gruesa previenen algún golpe durante el traslado.
- Fajas de viaje largo (arriba de 4 horas): pueden ser las mismas que las de trabajo, éstas ayudan a mantener en sus extremidades una estabilidad sanguínea ya que el animal se encuentra casi inmóvil durante varias horas, por lo general van por debajo de las vendas de reposo que le brindarán protección.
- Ligas de la cola: es de consistencia delgada y su material por lo general es sintético. Su función principal es proteger el maslo de cualquier tallón durante el viaje. Además, se debe de colocar tanto en viajes cortos como largos.
Alejandro Magno: Precursor de las vendas de descanso
Alejandro era un gran cuidador de su caballo. Le aplicaba ungüentos en las extremidades tras las guerras (precursor de las vendas de descanso). Nunca se acostaba sin tener la seguridad del buen cuidado y del descanso idóneo de su caballo.
En resumen, se debe consultar con un médico veterinario o en su defecto un fisioterapeuta experto en rehabilitación equina. Todo esto con el fin de que el caballo mejore rápidamente. Y Así no queden secuelas que luego haya que lamentar. Por otro lado, el caballo debe tener las condiciones idóneas para evitar cualquier tipo de lesión.
Fuentes Consultadas:
http://www.metodoroma.com/articulos-de-interes/vendajes-ecuestres/
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