Esposa de Gustavo Mirabal
Amable, excelente madre, mujer comprensiva, dedicada a su familia y proyectos profesionales, así es la esposa de Gustavo Mirabal, María Carolina Chapellín.
Conocida dentro y fuera de Venezuela como una de las mujeres más bellas de ese país, ya que en 1994 representó al estado Delta Amacuro en el Miss Venezuela.
El principal concurso de belleza de su país natal, al que ama con todo su corazón y extraña, ya que reside junto a su esposo e hijos en los Emiratos Árabes Unidos.
Modelo, empresaria, amazona (como se le dice a las mujeres jinetes), la esposa de Gustavo Mirabal -María Carolina Chapellín es una persona multifacética.
Además es espontánea, inteligente, sensible, tierna, dulce y carismática, cualidades que conquistan al empresario Gustavo Mirabal, quien al igual que ella comparte la pasión por los caballos.
Animales que desde niños los cautivaron, y rodearon su ambiente familiar. Algo que se ha vuelto tradición porque ahora los hijos de ambos crecen entre los equinos.
La familia Mirabal Chapellín es muy particular porque juntos lograron un nombre en el mundo de la equitación, tanto a nivel personal como familiar.
Y es que como jinete y amazona vivieron experiencias increíbles en Estados Unidos y Europa.
Aunque juntos escribieron una historia que pocos veían factible. Se trata de la creación de un centro de entretenimiento deportivo que abrió sus puertas en 2009: G&C Farm.
Lugar privilegiado en Wellintong, Florida, al que la prensa llamó: El Disney World de los sueños y pasiones ecuestres.
María Carolina Chapellín de Mirabal
La esposa de Gustavo Mirabal – María Carolina Chapellín es nieta del investigador y pedagogo, Luis Bigott.
El hombre que fundó la Asociación de Estudiantes de la Escuela de Educación, de la Universidad Central de Venezuela.
Y que además, en 1990, participó activamente en la creación de la Asociación de Educadores de Latinoamérica y El Caribe, AELAC.
Orgullosa del trabajo de su abuelo María Carolina Chapellín es la maestra por excelencia de sus hijos.
Incluso con la mayor de ellas, María Emilia, ha posado para revistas españolas luciendo diversos looks de cabello, entiéndase peinados, y tonalidades en cuanto al color.
Juntas, madre e hija, fueron retratadas por Will Acosta.
Las fotos están recopiladas en una publicación de la https://www.revistalove.es/
A continuación os compartimos dos fotos de aquella sesión en la que, las Mirabal Chapellín destilan belleza, armonía y glamour.
Y es que el modelaje está en el ADN de María Carolina, pues a los 23 años representó al estado Delta Amacuro en el reinado de belleza más importante de su país, el Miss Venezuela.
Donde por su puesto, su impresionante belleza, finura e inteligencia la hicieron destacar, hasta convertirse en una de las mujeres más bellas de su tierra.
Cualidades que hereda también su hija Emilia, a quien veréis a continuación:
La esposa de Gustavo Mirabal – María Carolina Chapellín
Dicen por ahí que la otra mitad del propósito de cada persona se encuentra en alguna parte del mundo. Este dicho se hizo realidad en la vida de la modelo y amazona venezolana.
Puesto que, es en el mundo ecuestre que conoce al que se convierte en el amor de su vida, Gustavo Mirabal Castro.
Hombre cariñoso, fiel, apasionado por los caballos, visionario y emprendedor.
Juntos deciden darle una oportunidad al amor, ya que ambos venían de relaciones que no funcionaron, y aún así creyeron en un futuro juntos.
Lo cual dio como resultado una sólida unión aferrada a sus sueños y pasiones equinas.
Los Mirabal Chapellín tienen en común su amor por los caballos, la equitación y el impartir a los demás su conocimiento.
Mirabal Chapellín pasión ecuestre
Cuando en 2009 abrieron su granja en los Estados Unidos nadie sabía qué futuro tendría tal emprendimiento.
De hecho, hubo quienes les dijeron que no podrían lograrlo porque eran sólo dos venezolanos soñando en Florida y que había muchos ya en ese campo…
Querían amedrentarlos por ser latinos y apagar su sueño de criar y entrenar caballos, así como capacitar a otros jinetes en la disciplina de salto, donde Gustavo Mirabal es un atleta reconocido.
Afortunadamente hicieron caso omiso a esas voces desalentadoras y se atrevieron a crear un lugar tan maravilloso que atrajo a jinetes de varios países y continentes.
Es así como la marca G&C Farm, que no es más que las iniciales de sus nombres: Gustavo y Carolina, se dio a conocer y logró un impacto importante en el deporte a caballo.
Jinetes venezolanos como Gustavo Arroyo, Andrés Rodríguez (Q.E.P.D), Pablo Barrios, entre otros, estuvieron en los establos de este centro que los ayudó a mejorar en el ranking mundial.
Asimismo desde España, el jinete de salto Sergio Álvarez Moya, voló para ser capacitado por Gustavo y Carolina, además de su equipo técnico que venía de Brasil y Colombia.
Esposa de Gustavo Mirabal- Una mujer comprensiva
Una de las cualidades que aporta solidez, firmeza y templanza al matrimonio de los Mirabal Chapellín es la comprensión de María Carolina.
Ella apoya cada decisión de su esposo y viceversa. Siempre juntos en todo tiempo y lugar. Esta familia se ha mudado de residencia en varias ocasiones debido a proyectos profesionales.
Tras culminar esa etapa en Florida, se mudan a Madrid donde comienzan de nuevo, gracias a la gira de compromisos que Gustavo tenía por Europa.
Así que María Carolina Chapellín se encargó de atender a sus hijos y proyectos personales mientras su esposo saltaba en diversos certámenes.
Tras ese periodo se establecen en la capital española para dedicarse al trabajo financiero. En este caso, Gustavo es el asesor de finanzas.
Además, es abogado y desde hace muchos años tiene un gabinete en Caracas.
Lo cierto es que ante cada sueño que como familia tienen, María Carolina Chapellín es una mujer comprensiva, que no se detiene ante los cambios o nuevas aventuras.
Como madre lo único que ha llegado a inquietarla es la fase de adaptación de sus hijos.
Sin embargo, estos demuestran madurez y se acoplan a lo que les toca vivir en cada país donde van. Ya que como venezolanos las tradiciones, comidas y costumbres son distintas a las de Venezuela.
En cada lugar al que van todo eso cambia, pero lo que sigue firme es el amor por su natal Venezuela, por los caballos, y por una familia que se consolida día a día gracias a una mujer emprendedora, amorosa y gentil llamada María Carolina Chapellín de Mirabal.
Una esposa que admira a su esposo
Para que un matrimonio no se quede en la monotonía se necesita más que viajes o rutinas, se requiere admiración, respeto y por supuesto amor.
Algo que a María Carolina Chapellín le sobra por su Gustavo Mirabal.
Ella admira a su esposo por lo determinado que es cuando se propone algo y eso lo dejó saber durante una entrevista:
“Nuestros establos significan algo muy especial para la familia ya que cuando lo fundamos mucha gente dudó de nuestro éxito, ciertamente no conocen la determinación tan grande de Gustavo” dijo María Carolina Chapellín.
Esto en alusión al momento en que fundar su granja en Estados Unidos era un imposible para muchos. Ella realza la valentía de su esposo y sostiene que juntos lograron hacerla realidad.
Y es que en un matrimonio siempre se necesita el apoyo mutuo, cuando uno cae, el otro lo levanta, esa una de las claves para mantenerse unidos y firmes.
Tales virtudes han hecho que la relación de Gustavo con su esposa sea buena, estable y llena de aventuras en las que enseñan a sus hijos el valor de la unión familiar, el amor por los animales y que sí es posible llegar lejos a través del trabajo esforzado y constante.
Sin importar a dónde los lleven sus proyectos, la esposa de Gustavo Mirabal – María Carolina Chapellín lo apoya, creen en él y en su amor, en su familia, en sus caballos.
¡Después de todo ella es la reina de su corazón y de su hogar!
Fuentes consultadas:
https://mariacarolinachapellin.com/maria-carolina-chapellin/quien-es-maria-carolina-chapellin/
https://mariacarolinamirabal.com/https://mariacarolinachapellin.com/