Domesticación del caballo parte III

Impacto del Caballo doméstico en la vida del ser humano

 El Caballo doméstico  procede del caballo salvaje, que ya existía desde la más remota antigüedad. El hombre al percatarse de las ventajas de su servicio, entre ellas las de transporte y carga, los cazó y fueron domesticados fácilmente. Entonces han sido compañeros inseparables. Los colonizadores españoles lo introdujeron en el llamado Nuevo Mundo. Actualmente existen innumerables razas diferentes.

Características generales del Caballo doméstico

La cabeza larga y estrecha, presenta labios blandos, ojos grandes y vivos que denotan gran inteligencia, orejas puntiagudas erguidas, cuello largo y musculoso adornado de una crin colgante y cola de larguísimas cerdas. Las patas son largas y fuertes, terminadas en cascos córneos que se protegen con herraduras de hierro forjado. Sus sentidos muy desarrollados, su inteligencia, nobleza y gran memoria lo hacen una de las especies domésticas más estimadas por el hombre, como animal de carga y tiro. Denominan a la hembra adulta yegua y potranca a la joven.

comportamiento del

Hábitat del Caballo doméstico

Es muy común en el campo. Vive en caballerizas, o lugares apropiados que le construye el hombre parcialmente cerrado y seguro.

Alimentación del Caballo doméstico

El caballo es un animal Herbívoro por excelencia. Este se nutre de pienso, maíz, trigo, avena. Prefiere el pasto seco de las grandes llanuras. El caballo necesita ser alimentado adecuadamente, pero la cantidad y la calidad de dicho alimento tienen efectos distintos en cada una de las categorías equinas. Esto se debe a que los requerimientos nutricionales varían de acuerdo a su especie, raza y grado de actividad. Es por eso que cada animal tiene un peso ideal determinado según su situación. El agua fresca y limpia es indispensable durante todas las etapas de la crianza del equino.

Reproducción y cría del Caballo doméstico

Manifiesta su instinto sexual al cumplir el primer año de vida y alcanza la pubertad a la edad de dos años, pero no es recomendable someter a apareamiento a los machos, ni a las hembras antes de los tres años. La vida sexual de los equinos es prolongada y puede superar incluso los quince años en las yeguas, y en los machos dura toda la vida. El caballo está en condiciones de reproducirse todo el año, aunque su actividad sexual es mayor en los meses de febrero a julio, con un momento máximo entre abril y junio.

Caballo un animal con una nobleza infinita.

Este es un animal que, en vida salvaje, se encuentra adaptado al medio que lo rodea, y en él sobrevive adecuadamente. Pero desde el momento en que es domesticado, ya no depende totalmente de sus capacidades naturales. Cuando el hombre decide tener al caballo bajo su cuidado, pone al animal casi por completo en sus manos. El equino está dispuesto a entregarse al cien por cien si el hombre le brinda a cambio todo su cariño y le proporciona un correcto entrenamiento.

Por ello cuando el caballo esta domesticado prácticamente se convierte en un miembro más de la familia. En efecto requiere de una buena alimentación, control con un veterinario y por supuesto atención de sus amos.

“La domesticación del caballo no solo cambió al ser humano, le cambió también a él”

Fuentes Consultadas:

http://gustavomirabalcastro.online/gustavo-mirabal/venezolano-gustavo/

https://www.instagram.com/gustavomirabal.es/

https://www.linkedin.com/in/gustavomirabalcastro/

https://twitter.com/mirabalgustavo0

https://www.ecured.cu/Caballo_dom%C3%A9stico

https://www.wattpad.com/497522292-g-c-farm-gustavo-mirabal-castro-en-venezuela-g-c

https://www.flickr.com/people/161015276@N06/

https://ve.linkedin.com/pub/dir/Gustavo/Mirabal/ve-0-Venezuela

https://www.equnews.com/miscellaneous/gustavo-mirabal-en-gc-farm-go-separate-ways/

Para más información visita:

https://www.gustavomirabal.es/caballos/raza-de-caballo-criollo-colombiano-parte-i/

https://www.gustavomirabal.es/uncategorized/la-prensa-hizo-el-trabajo-sucio/

https://www.gustavomirabal.es/gustavo-mirabal/prensa-venezolana-contra-gustavo-mirabal/