Gastronomía navideña en Venezuela

Gastronomía navideña en Venezuela

La navidad tiene una grata bendición, se trata de unir a la familia venezolana en la más exquisita y tradicional gastronomía.

Cada plato lleva consigo el sazón de abuelas, madres e hijas que en cada generación aprenden a conocer las especies, aromas y los secretos culinarios de cada comida.

Detrás de la gastronomía en Venezuela hay toda una cultura, historia y sobre todos valores que son parte de la identidad nacional.

En este sentido, las reuniones familiares y  fiestas es grato compartir entre amigos, es lo más emblemático de esta época.

Por hoy, los venezolanos han llevado la variedad y riqueza de sus platos al extranjero para sorprender las nuevas culturas.

Los colores en los platos venezolanos varían en cuanto a tonos formando mosaicos que van desde los naranjas, rojos intensos, pasando por los violetas, verdes de hojas y ramas que engalanan los platos.

La delicadeza de los sabores y aromas se ponen de moda cada diciembre para endulzar y sensibilizar los más finos paladares.

Es importante destacar, que en algunos casos lo dulce se combina con lo agrio y salado para encantar el gusto.

Gastronomía navideña en Venezuela

La hallaca, una tarea con muchos roles.

Las cenas navideñas en familias, empresas y amigos llevan el exquisito sabor tradicional de una hallaca.

No hay claridad de la historia de la hallaca, aunque la mayoría de los expertos coinciden que proviene de la época de la colonización.

En el pasado se dice que los esclavos usaban los sobrantes de comida con masa de maíz.

Así mismo, hay algunos referentes que adjudican el uso de la hoja de plátano en la gastronomía autóctona de los indígenas venezolanos.

Ciertamente, detrás de este plato hay grandes influencias africanas, españolas y nativas.

De igual manera, cada región del país imprime su sello y originalidad a la hora de recrear este excelso plato que nos une con la historia y tradición.

A continuación se muestra algunos elementos y cualidades de las hallacas según las regiones venezolanas.

Particularmente, Los Andes venezolanos conformado por los estados Táchira, Mérida y Trujillo se hacen con el guiso crudo y se incorpora garbanzos.

En Zulia se emplea para su envoltura   hojas de bijao y se hace una variación con masa de plátano.

Por otra parte, en los estados orientales Sucre, Anzoátegui, Monagas, Delta Amacuro, y Nueva Esparta se le incorpora huevo cocido y papa picada sancochada al relleno.

En Caracas, la capital de Venezuela el guiso se cocina, llevan un toque dulce del papelón, y se adorna el guiso con cebolla y pimentón.

Mientras que en la Guayana los guisos no se hacen con las populares  carnes de res, cochino y pollo, se prepara con pescado.

¿Cómo preparar las hallacas venezolanas?

La masa se hace con harina de maíz precocida, se va tintando con onoto, algunas mujeres venezolanas humedecen la maza con caldo de gallina para darle mejor sabor.

Seguidamente la preparación del guiso es todo un ritual, donde la familia se reúne para picar:

Cilantro, perejil, cebollas, apio España, pimentón, ajos, nuez moscada, vino, ají dulce, cebollín, especies y por supuesto las carnes: res, pollo y cerdo.

En algunos hogares se prepara todo el mismo día, o dependiendo de la cantidad de hallacas se divide la jornada.

Otra tarea importante es la preparación y selección de las hojas de plátano o cambur, aunque la segunda es mejor.

Preparar la hoja de cambur implica calentarla en fuego con la misma hojarasca de la planta, aunque por lo general ya se compran preparadas no más de limpiar y ordenar por tamaños.

Una vez que cada estos compromisos estén listo, se humedece la hoja con aceite y onoto, se monta una porción de maza y se aplana con cuidado.

Posteriormente, se agrega el guiso y se puede incorporar garbanzos, pasas, aceitunas, alcaparras y según la región puede sumarse el chicharrón, huevo cocido, papa cocida, zanahoria, entre otros.

Luego se termina de envolver en la hoja y se amarra con el pábilo o pita.

Depende de la región se cocina las hallacas, todo depende del guiso.

Ya luego de esta ardua tarea, las familias venezolanas disfrutan de los sabores y colores  de esta emblemática comida venezolana.

El Pernil, los oscuros y aromatizantes sabores

La gastronomía venezolana incorpora la carne de cochino en varias facetas, quizás esta es una manera que requiere tiempo, dedicación y un toque de paciencia.

En este plato se suele emplear alguno de estos ingredientes:

El pernil de cochino, vino tinto, cebolla picada, agua, pimentón, ají dulce, ajos, salsa inglesa y soya, mantequilla, pimienta molida, orégano, especies y sal al gusto.

Por lo general, los ingredientes picados se mezclan en un gran tazón. Así mismo debe inyectarse el vino al pernil.

Luego con parte de la mezcla preparada debe humedecerse el pernil y se recomienda macerar de un día para otro.

Al otro día debe  cubrirse con mantequilla y se sigue humedeciendo entre el vino y la mezcla.

Luego debe colocarse a hornear y se va incorporando progresivamente el agua, hasta completar un máximo de dos tasas.

Una vez horneado debe revisarse con un punzón y  el pernil está seco, es decir no bota líquido indica que ya está.

Se requiere a lo menos de tres horas para el horneado del pernil, pero depende de los kilos que tenga la pieza.

Gastronomía navideña en Venezuela
Gastronomía navideña en Venezuela

El pan de jamón

Este plato es toda una joya de la comida venezolana, es un  pan con un ligero toque dulce que reúne jamón, tocineta, pimentón, pasas, alcaparras, aceitunas y en algunos casos el queso amarillo.

Algunos hogares hacen sus variaciones incorporando frutas confitadas.

Generalmente, se sirve la noche de la navidad acompañada de la hallaca, el pernil y la ensalada de gallina.

Así es la comida venezolana, asombrosa, capaz de unir el talento, los sabores y aromas en su diversidad de platos.

Un toque dulce en navidad – Gastronomía navideña en Venezuela

Como se mencionó previamente, la navidad tiene sabores que van entre el dulce y lo salado, es una combinación perfecta que nos hace la festividad única y amena.

El dulce que más acompaña la navidad es el de lechosa, todo un manjar de la gastronomía venezolana.

Particularmente, el dulce de lechosa puede incorporar un toque de piña o el delicado cabello de ángel y queda exquisito.

Así mismo, las reposteras aman preparar para la festividad una torta negra y desde la cultura europea se adquiere el rico Panetón.

En cambio la torta negra puede llevar pasas, maní, almendras, frutos y  confitadas, se humedece con algunos licores.

Las madres y abuelas más expertas maceran los frutos con licor previo a la preparación de la receta.

Así también cada región tiene sus postres típicos, en los Llanos se hace el caroto que es una bebida muy popular que lleva maíz pilado, canela, guayabita y clavitos.

Del mismo modo, hay otros postres presentes en la cultura venezolana como el tradicional quesillo, el ponche crema o la leche burra.

El quesillo usa como base huevos, leche, jugo de naranja, azúcar y su respectivo melado de base.

Cada plato es una delicia que une a las familias en torno a su elaboración, es un disfrute perfecto, a Gustavo Mirabal le encanta esta época del año, pues es un momento propicio para compartir en familia.

Finalmente, la navidad es sencillamente los momentos que se coleccionan entre amigos, familiares, es esa celebración que nos reúnen entorno a diversidad de platos, donde los sabores encantan todos los paladares.