Los caballos divinos

La pintura es un arte, un medio para la expresión, una forma de llevar un mesaje al mundo.

Eso es lo que ha hecho el pintor francés Andre Brasilier, quien ha enviado un mensaje de amor y cuidado por la naturaleza.

Con sus pinturas, este hombre, de casi 89 años, ha exhortado a valorar cada instante y apreciar la creación de Dios.

Lo más curioso de este artista es que los caballos son su mayor inspiración.

Sobre el pintor

Este pintor nace en Saumur, Francia, en 1929. Día que se convertiría en uno de los más importantes para el arte.

A la edad de 20 años, comienza a realizar una carrera artística increíblemente larga y única que se mantiene distintiva a lo largo de los años.

Rodeado de belleza natural desde su infancia, inspirado por sus sus padres quienes fueron pintorestambién, decide quedarse como el pintor de la naturaleza.

Esa ha sido la línea inquebrantable que lo ha distinguido de muchos otros pintores en su país y el mundo.

Tanto así que sus pinturas aumentan de precio en el mercado internacional cada vez más.

Incluso, en las subastas internacionales los aficionados a este mundo de la pinturas pagan caro por una obra de Andre Brasilier.

Fiel a su estilo

Ya son 65 años de carrera como artista y desde entonces Brasilier se mantiene fiel a su estilo y arte.

Nada ha podido hacer que el pintor de paisajes y animales se vaya por otra rama…

Con la abundancia de temas que podría abordar este artista sería inimaginable el número de sus obras, sin embargo, lo que más ama es pintar sobre la naturaleza y paisajes románticos.

Así que esa es la línea que lo define y caracrteriza, por lo que no la cambia por nada ni por nadie.

¡Admirable! Siempre es hermoso conocer o saber de alguien que es fiel a todo lo que ama, piensa y cree.

Son precisamente ese tipo de personas los que suelen estar más claras en la vida y gudan muchas veces, los consejos más sabios.

Andre Brasilier se conoce también por sus paisajes surrealistas, que aligeran el alma con infusiones de ensueño de figuras ambientadas en la simplicidad de los colores.

La combinación de formas y figuras entre sus paisajes son su huella.

Todo esto como parte de una “íntima comunión con la naturaleza. Este francés se inspira en su lenguaje, sonidos y colores, revelando así la belleza natural de nuestro entorno”, reseña el portal https://www.widewalls.ch/artist/andre-brasilier/

Los caballos divinos

En esa búsqueda por distinguirse y hacerse único encuentra un punto que lo lleva al clímax.

Los caballos se vuelven su inspiración más profunda y a ellos les dedica gran parte de sus obras.

“Los caballos se convierten en los puntos centrales de su trabajo debido a su armonía con la naturaleza. El caballo comienza a dar un sentido de escala, proporcionando diálogos interesantes con las proporciones del mar y el cielo”, refiere un artículo publicado en el https://www.widewalls.ch.

Brassier ama la vida, y para él los caballos se convierten en importantes catalizadores del placer, con sus formas y su ardor.

De esta manera dicho animal comienza a ser catalogado como los caballos divinos.

“Los caballos fueron mis primeros modelos mientras vivía en el campo con mis padres”, dijo Brasilier a CNN en español, quien ganó el codiciado Gran Premio de Roma a los 23 años.

Atraído por la belleza espectacular de los caballos, Andre Brasiliera, comienza su carrera inspirado por la majestuosidad de éstos.

Siendo los caballos que araban en los campos.

De acuerdo con información publicada en CNN en Español el valor de las pinturas de Brasilier ha aumentado “un 557% durante los últimos cinco años, un salto que se refleja en la cantidad de piezas vendidas en subastas”.

El único pintor de la familia

Aunque sus dos padres eran pintores y Andre tiene cinco hermanos más, él es el único que hereda ese ADN de artista.

Sus otros hermanos se fueron por ramos distintos, ninguno se fue por el arte, sólo Andre.

“Los caballos son una creación estupenda. Están cargados de simbolismo, fortaleza, dinamismo, belleza. Son una fuente de inspiración”, dijo el pintor francés a CNN en Español.

Los caballos divinos como él mismo los llama le sirven siempre como fuente de inspiración y le llenan de energía.

Es impresionante saber que el trabajo artístico de este pintor ha sido exhibido en el prestigioso museo State Hermitage en San Petersburgo, Rusia.

El caballo como motivación

Una de las cosas que más le gusta a Brasilier de los caballos es la forma en como ha evolucionado a lo largo de la historia y a la par dle hombre.

“Hay vida y movimiento en el caballo. Amo los caballos en cada forma en que han evolucionado con nosotros. Desde los inicios del arte con las pinturas en cavernas, los caballos siempre han sido un gran amor del ser humano, un símbolo de divinidad”, declara a CNN en Español.

“Los caballos siempre están en un ambiente bello, en el corazón de la naturaleza, no es posible distinguirlos de la naturaleza. Lo que me interesa es esta búsqueda de la belleza”, detalla.

Obras en galerías famosas

En noviembre de 2018, Andre Brasilier se alistó para asistir a Londres donde se expuso una obra suya.

La última para ser exactos, puesto que por su edad es probable que ya el artista comience a llevar una vida más tranquila.

Así que noviembre es el mes en el que Andre Brasilier viaja con su esposa a la capital inglesa para la inauguración de su última exhibición en el Ópera Gallery.

Enamorado de su esposa

Más allá de esa pasión por la pintura ecuestre, este artista tiene otra musa que de vez en cuando y de cuando en vez le lleva por otros parajes.

Como buen francés, el pintor está enamorado de su esposa… No podemos olvidar que Francia, especialmente París, es conocida como la ciudad del amor.

Chantal es la otra musa de Andre Brasilier…

El amor en su máxima expresión es plasmado en sus pinturas cuando ella es quien lo inspira.

La picardía que el amor trae consigo así como la pasión y la belleza, se juntan para derrocharse en un solo lienzo.

Durante una entrevista de CNN en Español a este artista, el matrimonio no pudo evitar las sonrisas jocosas tras hablar sobre Chantal como motivo para sus obras.

“No soy un artista del movimiento realista, me interesa el arte que transforma”, explica Brasilier al medio de comunicación.

“Cuando pinto a mi esposa, no es realismo, quiero ir más allá de la realidad”, detalla muy entusiasmado.

Éxito de sus obras

Para 1953, con solo 23 años, el artista gana el Premier Grand Prix de Rome de la pintura.

Brasilier tiene su primera retrospectiva de 100 obras de arte de 1950-1980 en el Château de Chenonceau; Una exposición retrospectiva en el Musée Picasso-Château Grimaldi en Antibes (Riviera francesa) en 1988.

A lo largo de los años realizó numerosas exposiciones en todo el mundo: Francia, Alemania, Japón, Suiza, Canadá, Estados Unidos, Rusia, Holanda, Corea, Hong Kong … En particular, fue honrado por una exposición retrospectiva de su trabajo en el renombrado Museo del Hermitage en Saint-Pétersbourg en 2005 y en la Museum Haus Ludwig für Kunstausstellungen en Alemania en 2007.