Nutrición para prevenir enfermedades en caballos (II)

“Somos lo que comemos”
Ludwig Feuerbach

En esta entrega continuaremos hablando de las enfermedades asociadas a la nutrición equivocada de los equinos. Hablaremos de la Laminitis equina y la enfermedad de los lunes.

Laminitis equina

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Otra enfermedad que puede generar la mala nutrición es la laminitis, conocida también como infosura y de la cual hemos hablado anteriormente con más detalle. Un problema generado en las pezuñas, por lo que muchas veces sorprende que estén relacionados con la alimentación. Se produce al verse interrumpido el flujo sanguíneo en las láminas del casco o pezuñas. Esta enfermedad provoca al caballo gran dolor y graves problemas de movilidad.

Los cambios de metabolismo debidos a la mala alimentación afectan a los cascos. Por ello es necesario evitar trastornos digestivos en la dieta del animal para prevenir la Laminitis. Otro de los factores fundamentales proviene de la sobrealimentación del caballo. El propio sobrepeso del caballo debido a la sobrealimentación, además de el exceso de diferentes nutrientes, como son el almidón afectan el flujo sanguíneo a las pezuñas del caballo. Evitando estos errores en la nutrición disminuiremos las probabilidades de esta enfermedad. Aun así no eliminamos con ello todas las causas pues un traumatismo o una lesión en el casco mal curada también la puede provocar.

Enfermedad equina del lunes

Conocida como rabdomiolisis o azoturia es una enfermedad que muestra síntomas de agarrotamiento muscular. En los casos muy graves el caballo puede perder la capacidad para moverse.

Durante el siglo XIX y a principios del siglo XX, los caballos en las fincas no trabajaban los domingos. En esa época, no se reducía la cantidad de pienso con que se alimentaban los caballos en los días de descanso. Además el pienso en sí estaba basado totalmente en mezclas de cereales. De vez en cuando, algún caballo se colapsaba de manera repentina, con daño muscular severo, el Lunes durante el trabajo. Por esta razón, uno de los nombres comunes de esta enfermedad es “La enfermedad de los Lunes”.

En cuanto se empezó a observar la relación existente con la nutrición y con el manejo de cuadra, disminuyeron de manera importante los casos de esta enfermedad. Pero, en la década de los años 30, se volvieron a ver bastantes casos por la práctica de moda en esos años de proporcionar grandes cantidades de melaza al caballo antes del ejercicio.

Al igual que sucede con la laminitis equina, el exceso de una nutrición alta en carbohidratos solubles (como el almidón) en la dieta puede ser uno de los condicionantes que hace que aparezca esta enfermedad, así como otros carbohidratos. Otro punto importante para paliar en lo posible su aparición es la de dosificar la ingesta de comida. Al igual que la alimentación, hay que revisar también el ejercicio que realiza el animal, sobre todo tras varios días de estar el caballo sin actividad física, para lo cual la intensidad se tiene que incrementar de forma gradual.

A cuidar la nutrición de tu caballo

Como has podido comprobar, la mala alimentación puede contribuir a generar enfermedades de todo tipo a nuestro caballo y en diferentes partes de su cuerpo. ¡Cuídalo y te lo agradecerá!