El mundo equino en las historias de un hombre que medita y escribe
Ya hemos conocido a través del tiempo que forman parte del mundo equino, los caballos los asnos y las cebras.
Esopo escribió historias sobre una amplia diversidad de animales y en esta amplitud, concedió singular importancia a los caballos y a los asnos.
Hasta el momento no hemos encontrado en ninguno de sus relatos, la presencia de las cebras. Quizás no escribió sobre ellas por la ausencia de éstas en su ámbito geográfico y porque esta especie animal todavía no se había desarrollado.
Los caballos y los asnos en las fábulas de Esopo
Está claro que cuando hablamos de las fábulas, estamos hablando de la presencia de cosas y de animales a los cuales se les da vida propia y a los que se les imprimen sentimientos, y raciocinio a l mismo tiempo.
En el mundo equino que es el que nos ocupa actualmente, los caballos y los asnos, dialogan para enseñarnos sobre diferentes valores.
También son dos especies que forman parte significativa de las narraciones producidas por Esopo, y como en la mayoría de las fábulas siempre encontramos una enseñanza, una moraleja en cada uno de estos relatos.
Las fábulas más conocidas sobre caballos y asnos de Esopo
Entre las fábulas más conocidas de Esopo, en las que resalta el mundo equino, recordamos algunas de las más emblemáticas: El caballo y el asno, El perro y el Asno, La Mula, La Cabra y el Asno, El Caballo y el soldado, El Caballo y el palafrenero, El lobo y el asno, entre otras múltiples fábulas.
¿Qué es una fábula?
Una fábula es una narración corta, por lo general muy sencilla, a través de la cual se transmite una enseñanza.
Por lo general, las fábulas son caracterizadas por la presencia de animales de diferentes especies. Estos son los protagonistas de estas historias.
No obstante, a pesar que la extensión de las fábulas en sus orígenes era bastante corta, con el tiempo han cobrado una extensión más larga.
La extensión de los relatos de las fábulas
Durante el siglo XX se escribieron fábulas como la de Platero y Yo del escritor español Juan Ramón Jiménez una de las más conocidas universalmente, pero la literatura universal está llena de historias de animales humanizados, que luego se han llevado a la experiencia cinematográfica, al teatro y a otras expresiones artísticas.
Objetivo de la fábula
La mayoría de las veces, las fábulas son producidas con una intención moral, con una aplicación didáctica en los procesos de enseñanza y de aprendizaje. Esto implica que en la mayoría de los relatos de las fábulas, al final se coloca una expresión que se llama Moraleja que implica una enseñanza.
Se activa un pensamiento crítico y reflexivo, que bien puede ser trabajado con niños y adolescentes, pero también con personas adultas.
He aquí algunas de las fábulas equinas más conocidas de Esopo:
El caballo y el asno
Un hombre tenía un caballo y un asno. Un día que ambos iban camino a la ciudad, el asno, se sintió cansado, le dijo al caballo:
– Toma una parte de mi carga si te interesa mi vida. ¡Cuídame!
El caballo haciéndose el sordo no dijo nada al asno.
Horas más tarde, el asno cayó víctima de la fatiga, y murió allí mismo.
Entonces el dueño echó toda la carga encima del caballo, incluso la piel del asno. Y el caballo, suspirando dijo:
– ¡Qué mala suerte tengo! ¡Por no haber querido cargar con un ligero fardo ahora tengo que cargar con todo, y hasta con la piel del asno encima!
¿Qué enseñanza nos deja está fabula?
Moraleja: Cada vez que no tiendes tu mano para ayudar a tu prójimo que honestamente te lo pide, sin que lo notes en ese momento, en realidad te estás perjudicando a ti mismo.
La Mula
Henchida de cebada, una mula (producto del cruce de asno y yegua) se puso a saltar, diciéndose a sí misma:
- Mi padre es un caballo veloz en la carretera, y yo me parezco en todo a él.
Pero llegó la ocasión en que la mula se vio obligada a correr. Terminada la carrera, muy contrariada, se acordó de pronto de su verdadero padre: el sereno asno.
Moraleja: Siempre debemos reconocer nuestras raíces, respetando nuestras herencias y las ajenas. Cuenta Esopo esta fábula corta y muy sencilla para hablarnos del respeto a nuestros orígenes y a la aceptación de nosotros mismos. Esto algo que vale la pena recordar todos los días de nuestra vida.
El caballo, el buey, el perro y el hombre
Cuando Zeus creó al hombre, le concedió unos pocos años de vida. Pero el hombre, poniendo a funcionar su inteligencia, al llegar el invierno edificó una casa y habitó en ella.
Cierto día en que el frío era muy crudo, y la lluvia empezó a caer, no pudiendo el caballo aguantarse más, llegó corriendo a donde el hombre y le pidió que le diera abrigo. Le dijo el hombre que sólo lo haría con una condición: que le cediera una parte de los años que le correspondían. El caballo aceptó.
Y luego esto fue lo que sucedió:
Poco después se presentó el buey que tampoco podía sufrir el mal tiempo. Le contestó el hombre lo mismo: que lo admitiría si le daba cierto número de sus años. El buey cedió una parte y quedó admitido.
Por fin, llegó el perro, muriéndose de frío, y cediendo una parte de su tiempo de vida, obtuvo su refugio.
Los resultados
Y he aquí el resultado: cuando los hombres cumplen el tiempo que Zeus les dio, son puros y buenos; cuando llegan a los años pedidos al caballo, son intrépidos y orgullosos; cuando están en los del buey, se dedican a mandar; y cuando llegan a usar el tiempo del perro, al final de su existencia, se vuelven irascibles y malhumorados.
Moraleja:
Esta fábula describe las etapas del hombre: niñez inocente, vigorosa juventud, poderosa madurez y sensible vejez.
¿Quién fue Esopo?
Esopo fue un escritor griego que nació entre los siglos VI y VII, antes de Cristo. Fue un narrador de inmensa cultura.
Poco se sabe de su historia, pero existen datos de investigadores e historiadores como Heródoto que afirman que este escritor griego contador de fábulas había sido un esclavo. Aún así hay quienes dudaron de su existencia real.
Afirma Heródoto que La Grecia antigua atribuyó a Esopo, la creación de este género literario, uno de los más antiguos de la literatura universal
Aristófanes, el reconocido dramaturgo confirmó la historia contada por Heráclides sobre la vida de Esopo y sobre las tristes circunstancias de su muerte:
Esopo, al visitar Delfos, provocó a sus habitantes al declarar que estos no trabajaban y vivían solo de las ofrendas dedicadas al dios Apolo. Furiosos, los habitantes implantaron en la maleta de Esopo una copa sagrada para incriminarlo. Cuando el “robo” fue descubierto, Esopo fue condenado fatalmente a ser arrojado desde un despeñadero (https://www.biografiasyvidas.com/biografia/e/esopo.htm) Consulta, 3 de mayo de 2019.
Referencias bibliográficas:
https://www.gustavomirabal.es/gustavo-mirabal/el-verdadero-gustavo-mirabal-castro/
https://www.gustavomirabal.es/uncategorized/gustavo-mirabal-en-el-mundo-ecuestre/
https://www.gustavomirabal.es/equitacion/el-hipismo-en-venezuela-tiene-nombres/
http://gustavomirabalcastro.online/
https://www.instagram.com/gustavomirabal.es/
https://www.linkedin.com/in/gustavomirabalcastro/
https://twitter.com/gmirabalcastro2
http://about.me/gustavomirabal
https://www.google.com/search?q=bibliotecadigital.ilce.edu.mx%2Fsites%2Fciencia%2Fv+olumen3%2Fciencia3%2F154%2Fh Consulta, 3 de mayo de 2019.
https://www.biografiasyvidas.com/biografia/e/esopo.htm Consulta, 7 de mayo de 2019.
https://www.flickr.com/photos/161015276@N06/33569658188