La pasión, la entrega, el compromiso, dan fruto cuando se mezcla el talento con el esfuerzo. Esto fue lo que llevó al jinete y empresario venezolano Gustavo Mirabal Castro a convertirse en fundador de una de las granjas ecuestres más apetecidas en Estados Unidos y Europa.
Wellington, Florida, fue testigo en el año 2009 del nacimiento de G&C Farm la granja de Gustavo y su esposa María Carolina Mirabal, la cual se convirtió en una plataforma para el impulso de nuevas generaciones por sus modernas instalaciones y equipos.
“Durante mis estudios en los Estados Unidos participé en el equipo de salto ecuestre del instituto y casi 30 años después la granja es una realidad”, declaró Gustavo Mirabal al portal laprensadecaracas.com.
Caballos de calidad
La calidad ofrecida en cuanto al entrenamiento y formación de atletas hicieron que G&C Farm se volviera el lugar favorito de jinetes venezolanos, norteamericanos y europeos.
“El mundo ecuestre es como la vida, si no te sumerges de lleno en ella no obtendrás resultados. La dedicación y el empeño que mi esposa y yo le hemos dedicado a G&C Farm es lo que materializó este gran proyecto”, destacó el deportista venezolano.
El trabajo de mercadeo y las alianzas comerciales hicieron posible que el nombre de G&C Farm comenzara a sonar en diversas competencias.
Alianzas de triunfo
Tras el éxito de G&C Farm, el jinete español Sergio Álvarez Moya, número uno de su país, se alió con el jinete venezolano. Ahora trabajan juntos en Madrid en pro del deporte ecuestre.
La pasión de Gustavo Mirabal hizo que el tricolor patrio estuviera presente en competencias importantes y ahora Venezuela es un símbolo de respeto y admiración.
En este sentido, para el jinete criollo la constancia, el estudio de la técnica y el empeño son necesarios, “este es el gran aprendizaje que nos deja el deporte en general. Si bien el mundo pareciera que premiara solo el talento, la realidad es que el trabajo duro vence al talento cuando este no se esfuerza”, acotó.
El deporte como pilar de la sociedad
Mirabal considera que detrás de todo triunfo hay un gran esfuerzo y personas dedicadas, por lo que insta a la promoción del deporte como un pilar de la sociedad.
“El deporte ecuestre si lo ves desde afuera puede parecer todo muy bonito, pero detrás de la elegancia y la fuerza de los caballos hay personas que no se rinden, personas con unos valores forjados a través de la disciplina”, resaltó.
Actualmente el jinete y empresario venezolano Gustavo Mirabal continúa dedicado al deporte ecuestre, sin competir, porque se retiró este año y, es considerado un importante promotor de la hípica en España.
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